Acomodémonos en el lugar apropiado y disfrutemos de la belleza que a veces nace del ser humano: En cada una de las fotos, ordenados sentimentalmente, fragmentos de las obras -palabras de autores- que llegaron a mi vida para quedarse. Quisiera compartir las palabras que me han acompañado, descubierto, llevado al éxtasis... En el mundo real, mientras, el tiempo transcurría y sucedían otras cosas. Sin todas estas palabras yo no sería yo. http://www.facebook.com/#!/PalabrasQuePueblanMiVida
domingo, 2 de enero de 2011
Lo que sé de mi vecino 47
Qué importa si me comí las uvas solo. La tele da mucha compañía. A la 1 y media me fui a la cama. Y a las 2 menos cuarto unos tipos se querían colar en mi casa para hacer botellón. Mira que es difícil que toque la lotería..., pero qué fácil gastar una broma a unos tíos con ganas de fiesta y mandarlos precisamente a mi casa... Casi me tiran la puerta abajo. ¡Qué empeño! Luego me arrepentí de haberles mandado a hacer gárgaras en vez de irme con ellos. Está bien empezar el año sabiendo que no hay que dejar llevarse por la ira que te producen cinco tíos aporreando tu puerta y que todo tiene sentido en la vida. Yo estaba solo y alguien me envió compañía, eso es todo.
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Para mí los comienzos de año son siempre solitarios. A las doce y media, más o menos, se van mis padres a la cama y me quedo solo viendo la tele. Yo me iría también a la cama en ese momento, pero me empeño en seguir despierto hasta, por lo menos, las dos y media o las tres. Finalmente me voy a la cama a leer y así me duermo. Al menos, empiezo el año leyendo.
ResponderEliminarAunque estemos con gente a veces también podemos sentirnos solos... Pensaba que tus padres aguantaban más en Nochevieja... :-) Cuqui y yo también nos subimos pronto a dormir..., a la 1 o así... Y luego llegaron los que se empeñaron en entrar en casa... :-) Pasó de verdad... :-) Realmente creo que les gastaron una broma... Porque llamaron por teléfono para que les abrieran y seguían aporreando la puerta... :-) Pobres, luego me dieron pena... Ya sabes qué mal carácter tengo a veces... :-) Sólo a veces...
ResponderEliminar¡No me lo puedo creer! ¡pasó de verdad! :-) Fíjate que fiesta podías haber tenido en tu casa hasta las tantas. Pero no creo que a Cuqui le hubiera gustado... decididamente no le hubiera gustado nada :-)
ResponderEliminarA Cuqui no le gustó nada, por eso me enfadé yo también... Entre los petardos y los golpes en la puerta dejaba de gruñir para ladrar. Aunque ni se levantó de la cama.
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